Noticias / By Alianza Diálesis es Vida
23 Marzo 2023
En enero de este año, Fonasa publicó los resultados de un estudio de costos para la prestación de hemodiálisis, que fue desarrollado por la Universidad de Chile, y cuyo principal foco fue transformarse en un insumo para una toma de decisiones informada respecto del reajuste del arancel para 2023. Dicho instrumento reafirmó que el ecosistema de diálisis se encuentra en crisis, ya que los centros han estado operando entre 8,4% y 10,05% de pérdida al menos durante el último año.
Lo anterior se debe a que los costos de la prestación han oscilado entre $66.999 y $68.055, mientras que el precio establecido por Fonasa para la atención de pacientes en 2022 se fijó en $61.780.
Sin embargo, la situación resulta aún más preocupante si se proyecta el escenario para 2023. Según estimaciones del mencionado estudio, el costo por sesión de hemodiálisis para dicho periodo equivaldría a un 20,4% superior al precio máximo licitado vigente hasta el 31 de diciembre de 2022, dado que las remuneraciones debieran subir en un 10% y el precio de insumos en un 15%, con lo que el costo por sesión llegaría a $74.373.
El estudio de costos, que se construye a partir de una muestra de 20 centros de diálisis, surge luego del compromiso suscrito por Fonasa ante la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, en septiembre del año pasado, tras los esfuerzos desarrollados por todos los miembros del ecosistema agrupados en la Alianza Diálisis es Vida -pacientes, nefrólogos, enfermeras en diálisis y prestadores- por visibilizar esta problemática que tiene al sistema en una profunda crisis de sostenibilidad.
Cabe destacar que el instrumento plantea, además, que del total de la muestra, un 77,7% del costo de cada centro está determinado por el gasto en Recursos Humanos (enfermera/o, TENS Clínico, TENS Re-uso, médicos y auxiliar de apoyo), Insumos y Mantenciones, mientras que el Impacto del Decreto Supremo n°45 del Ministerio de Salud, el Impacto del Covid-19 y el financiamiento alcanzan el 7,5% en conjunto. Esto quiere decir que el principal costo del funcionamiento de la diálisis es el recurso humano (50%), el cual debe ser altamente especializado, y cuyas remuneraciones han ido aumentando en línea con la inflación.